domingo, enero 31

CADA INSTANTE ES UN REGALO, UN GOZO, UN MILAGRO

Saber vivir la vida es un gran descubrimiento. La felicidad no está en los momentos finales de logro. La felicidad se encuentra en el proceso. Se encuentra en cada día, en cada momento de la existencia. Y una de las formas más hermosas que tiene es la gratitud. 

Así hacemos la comida y no solo estamos contentos al final cuando la hemos terminado. Estamos contentos al disponer de cada uno de los alimentos. Damos gracias por tenerlos. Damos gracias por disponer de ellos. Damos gracias por cada gesto que vamos haciendo. 

Damos gracias por ir uniéndolos debidamente en el momento oportuno. Damos gracias por nuestra actitud de alegría. Y esa conjunción de alimentos y nuestra alegría le va proporcionando gradualmente un valor nutritivo inexpresable a la comida. Por todos estos pequeños momentos damos gracias. 

Eso es vivir el presente. Eso es vivir cada instante. Ese es el secreto de saber vivir felizmente cada instante de nuestra vida. 



sábado, enero 30

LA ALEGRÍA DE LA BIENVENIDA DEL DÍA

La hermosura del día se abre para recibirnos y escuchar esas palabras encantadoras en nuestros oídos: I NEED YOUR LOVE. Un momento gratificante acariciado por la luz y por los bellos pensamientos que nos inspiran en nuestro interior.



viernes, enero 29

UNA MIRADA NUEVA. UN NUEVO GOZO

Javier se sorprendía de lo que pasaba en su mente, de lo que pasaba en su rostro esos días. Hasta el momento había sentido que todos los días eran iguales, que nada nuevo llegaba a su vida rutinaria.

Los mismos rostros, las mismas palabras, los mismos encuentros, los mismos gestos cada día en las actividades diarias. Pero ahora descubría una nueva energía distribuida en su cuerpo con una ilusión sorprendente que lo encantaba. 

Hacía tiempo que había empezado a relativizar sus pensamientos que cruzaban su mirada. Había descubierto que eran repetitivos. Eran siempre los mismos, cargados de juicios, de valoraciones. Muchos de ellos los denigraba. Los condenaba y se corroía el alma. 

Una luz le había llegado. Una proposición le invitaba. "Todos esos pensamientos no son auténticos de tu verdadera alma". “No les des importancia como si fueran tuyos”, le decían con aprecio. “Aléjate de ellos con paso sereno, tranquilo y con calma”. 

Y casi sin darse cuenta, Javier notaba que esos pensamientos, al no hablar con ellos, y no darles cabida en su interior, poco a poco se alejaban. Lo dejaban tranquilo, sosegado y con calma. Un nuevo gozo se asomaba por las hechuras de su alma. 

Algo nuevo subía por sus pies, por sus rodillas y por su pecho. Y cambió su mirada. Una nueva vista se ofrecía a tratar con pensamientos que llegaban y al no ofrecerles apoyo, fácilmente circulaban. 

Dejaba que se marcharan. Su lugar era ocupado por un vibrar diferente desde el fondo de su alma. “Esto es lo que realmente eres tú”, le repetía esa luz que lo embargaba. En su experiencia sentía lo acertado de la decisión de dejar marchar la rutina de los pensamientos que se imponían cada mañana. 

Así empezaba a ser consciente de esa nueva mirada. Así sentía en su corazón un nuevo gozo con la ingenuidad del día que se ofrecía luminoso a su mirada.

jueves, enero 28

EL AMOR ES UNA PLANTA

Dos almas se encuentran. Se saludan. Se conocen. Hablan, comparten y un encanto indecible surge entre ellas. Su contacto les llena. Sus sonrisas lo celebran. Un bienestar interno ilumina sus miradas, aclara sus pensamientos y les abre un hermoso camino de una incipiente ilusión entre ellas.

La semilla de la amistad se ha plantado. Los siguientes contactos irán desarrollando las raíces de un conocimiento común en algunas sendas. Ambas deciden ser prudentes en su caminar. Establecen el respeto como elemento básico en su encuentro. Deciden la admiración como elemento de visión entre las dos. 

Saben que respetar es respetarse, admirar es admirarse y valorar, valorarse. El tiempo va pasando y estas raíces van hundiéndose en sus conversaciones y en sus visiones de vida. Las raíces van tornándose fuertes y van cogiendo los nutrientes para fortalecer esa relación entre dos almas nobles. 

Se valoran y van dejando que los días vayan amasando ese potencial de planta que entre ellas se desarrolla. Se aprecian y van sintiéndose, ellas mismas, más tranquilas y relajadas. Van desapareciendo sus suspicacias, sus escepticismos, y sus cautelosas prevenciones. 

El agua, los vientos, el sol de cada mañana, el verso compuesto y la lectura cariñosa de mensajes de encanto, van horadando el muro que protege sus almas de frustraciones y engaños, de palabras no genuinas y manipuladas. La planta sigue su proceso de ampliación de sus raíces y de algunos brotes en el tallo de su experiencia. 

Los días siguen pasando, se encuentran hermosamente enfiladas. Siguen los mismos caminos con una incipiente confianza de que aquello brota de nobles palabras, de ojos claros y sinceros, y de la bondad de sus almas. 

Sin darse cuenta, se ven sorprendidas, deslumbradas, algo nuevo está naciendo y ellas mismas son las depositarias. Empiezan a recoger el regalo de su prudencia, de su mutuo respeto y admiración. Se valoran y ven un espejo de hermosa belleza que corona su encuentro de mil fragancias. 

Esa hermosa sensación les descubre que pueden seguir bajando esas barreras internas de protección. Se sienten más seguras de exponerse entre ellas con sinceridad, naturalidad y genuino amor. 

La planta se hace fuerte. Unas buenas raíces se han hundido en el suelo con firmeza. Una seguridad se ha alzado en ese grueso tallo que contiene todo el encanto que entre ellas se ha desarrollado. 

Y los frutos de una hermosa fusión empiezan a germinar entre los ojos de las dos. El encuentro de sus tesoros internos se acerca con emoción. Ya no quieren estar solas. Se sienten llevadas de una brisa dulce de encanto puro y de alabastro. Y esculpen sus nombres en ese tallo que han creado. 

La planta, fuertemente consolidada, va abriendo sus hojas, sus flores a una nueva radiación, a un nuevo sol en su corazón, a un nuevo encanto que han construido entre las dos. 

Despliegan su caminar. Cada día riegan con sus encantos, con sus palabras, con su devoción, la hermosa planta, creación de dos almas en el interior de su corazón.

miércoles, enero 27

¿DEBEN CAMBIAR LOS DEMÁS?

Carlos tenía problemas de relación con su compañero de trabajo. Se había iniciado una buena amistad entre ambos. Los dos se sentían contentos. Una melodía suave se extendía en sus afectos y en sus conversaciones. Un día, sin esperarlo, Carlos recibió un mal gesto de su compañero. Fue increpado por su amigo y se sintió tratado como si no se conocieran.

Carlos, pasados unos días, habló con su compañero. Puso de relieve la amistad que habían iniciado. Subrayó los buenos momentos pasados. Ofreció su amistad con el mismo ánimo anterior. Sin embargo, su amigo guardó silencio. No reaccionó. 

Carlos descubrió estupefacto que algo se había roto sin quererlo, sin desearlo. Se sintió triste, mal, contrariado. Un pensamiento se instaló en su mente. "Yo no he roto esta relación estupenda. Es su error. Yo estoy en la nobleza y en la verdad. Él debe cambiar". 

Pasó el tiempo. La relación no se restauraba y solo se limitaba a los gestos de la “buena educación”. Carlos sufría. No era natural. Era ficticio ese contacto. Cierto día, coincidió con su amigo en el parking del trabajo. Dejaron sus coches. Carlos, al encontrarse con su amigo, trató de hablar con él. La respuesta de su amigo lo dejó helado. “Sólo deseaba saludarte, no deseo hablar más”. 

Carlos no entendía a su amigo y no se entendía a sí mismo. Esta situación le hacía sentir incómodo. ¿Por qué sufría, si no era el causante? ¿Por qué se inquietaba si en él no había nada contra su amigo? Unas preguntas que no le quitaban su herida interior. 

Un día tuvo un atisbo de esta situación. Carlos estuvo saludando a la madre de su amigo. Era una mujer abierta, comprensiva y con toques de sabiduría. Parecía que conocía la relación inexistente entre ellos. Le dijo a Carlos: “sabes, él siempre dice de ti que haces muy bien las cosas y que tienes muchos dones. Y que no puede compararse contigo”. 

Nada más apareció su amigo, su madre se calló de inmediato. Carlos vio, en su rostro, la contrariedad de la situación. Ella experimentaba la misma situación que vivía él. Y no estaba de acuerdo con su hijo. La relación debía ser restaurada. Carlos continuaba sufriendo. 

Un día, Carlos descubrió que debía cambiar su pensamiento. En primer lugar, debía ofrecer total libertad a su amigo para actuar. Darle la libertad de rechazarle. Lo que cuenta es la autenticidad, no la obligatoriedad. Carlos se había encerrado en la obligatoriedad de la relación. Y nada, en el amor, se puede cuadricular. 

A partir de ese día, Carlos se liberó de la preocupación. Aceptaba a su compañero como expresión de libertad. Y el amor, en la libertad, tiene un sólido fundamento de respeto y admiración. Carlos aprendió una faceta más del amor. No la tenía clara en su mente. Y le agradeció a su amigo, en su corazón, que le ayudara a encontrar esta nueva visión. 

martes, enero 26

EL AMOR NOS HACE ÚNICOS

Actuamos en la vida como si estuviéramos cieg@s para vernos a nosotr@s mism@s. Tenemos vista, tenemos ojos, tenemos visión, pero generalmente para los demás. Para nosotr@s, solemos estar cieg@s, muy cieg@s.

¿Cómo podemos vernos nosotr@s mism@s? Sin lugar a dudas en un espejo. Así nos vemos reflejad@s y admiramos nuestra figura externa y nuestra presencia. ¿Quién nos refleja nuestro interior? Las demás personas que nos rodean. Ellas actúan de espejos para reflejarnos nuestra alma. 

Nos dice, alguna que otra vez, una persona querida, que somos amables, cariños@s, afectuos@s, creativ@s y persuasiv@s. Que le impactamos y que despertamos elementos nobles en ellos. Y nosotros nos sorprendemos. “Eso me lo dice porque es muy amable”, pensamos nosotr@s. 

Y alguna otra persona nos lo repite. Y empezamos a pensarlo. La confianza que nos llega de fuera nos tranquiliza. Nos rompe las barreras de la timidez, de la falta de espontaneidad. Y esa confianza y admiración empieza a abrir la puerta de nuestro interior. 

Así nuestra naturalidad sale al exterior. Se manifiesta tal cual es. Nos sentimos amad@s y descubrimos nuestra verdad secreta que no hemos visto muchas veces, hemos inhibido otras y nos hemos ocultado bajo la careta de una aparente buena educación. 

El amor llega a nuestra vida, nos rompe todas las barreras y se produce la explosión que nos maravilla. Somos nosotr@s realmente y nos vemos por primera vez en toda su extensión. Nos sentimos únicos. Nos sentimos potentes, maravillos@s, agradables. Nos vemos, por fin, a nosotr@s mism@s. 

Nos damos cuenta que habíamos buscado afuera lo que estaba en nuestro interior y no veíamos. Por fin nos hemos visto reflejad@s en otra persona que nos ha dado amor. Ahora entendemos la afirmación de amarnos a nosotr@s mism@s.

Al amarnos nos vemos y recobramos la vista. Ya nos podemos ver a nosotr@s mism@s y dejamos de estar cieg@s en nuestro caminar por la vida. Hemos ganado el tesoro de vernos a nosotr@s mism@s por fin. 

Y nos sentimos únicos. Nos sentimos felices, agradables, entusiasmad@s. Y esa sensación es tan poderosa que nos construye y nos hace compartir con otr@s las salas de fiesta de nuestro interno jardín.

lunes, enero 25

LAS EMOCIONES Y NUESTRA SALUD

Un día me encontré francamente mal. Tenía catorce años. Sentía que mi estómago estaba todo revuelto, incómodo, desasosegado. No podía continuar en aquella situación.

Lo compartí con mi madre. Ella me indicó que debía ir al médico para que me diera algún medicamento para calmarlo. Entendí que tenía razón. Por alguna causa, se había alterado su normal funcionamiento y ahora me estaba realmente molestando. 

Lo tuve claro. Me dirigí a la consulta para conseguir el remedio. Esperé mi turno. Me fijé en las diferentes personas allí sentadas. Todas estábamos un tanto nerviosas, pesarosas y contrariadas. No era el lugar para reír ni para contarse historias ilusionantes. 

Solía escuchar, en las ocasiones que iba con mi madre, historias de adversidad que las personas trataban de compartir para sentirse entendidas, un tanto aliviadas y, en cierto punto, resignadas a la situación. 

Aquella mañana estaba solo. No había querido interferir en los quehaceres de mi madre y entendí que aquello podía manejarlo solo. Entraban los pacientes. Salían otros con las recetas en las manos y los documentos rellenados por la enfermera, según las prescripciones del médico. 

Al final me llamó a mí la enfermera. Entré. Me senté. Saludé al médico. Él me respondió con amabilidad. Y me invitó a que le refiriera el motivo de la visita. Le expliqué todos mis síntomas. El médico, atento, me escuchó. Quedó un poco pensativo y me lanzó su pregunta: “¿has tenido algún serio disgusto estos días?”

No me esperaba esa pregunta. Nunca había relacionado los estados emocionales con el funcionamiento del cuerpo. Le tuve que decir que sí. Que había tenido un serio revés hacía dos días. 

Él me invitó a que me tranquilizara y que tratara de relajar la tensión. “Le doy este preparado para relajar el estómago. Déjelo de tomar cuando se sienta bien”. Le asentí con la cabeza y con la aprobación de mi sonrisa. 

Nunca más pude olvidar que la alteración del estómago no era debida a ningún alimento nocivo o en mal estado, sino a una emoción tóxica capaz de interferir en el funcionamiento normal de mi organismo. 

Durante los años siguientes, me he preguntado sobre la influencia de las emociones en el desarrollo de mi salud. Y he tratado de mejorar mis emociones con la ayuda de mis creencias adecuadas. Y es un hermoso camino.

domingo, enero 24

EL EFECTO BOOMERANG

Siempre nos encanta jugar con el efecto “eco”. Estar en un paraje, rodeado de montañas. Gritar un nombre y recibirlo con una profundidad, una amplitud y una fuerza no utilizada.

Gritamos: “amor” y nos devuelve: “AAAMMMMMMOOOOOOORRRR”. Si no decimos ninguna palabra, no nos devuelve nada. El origen del eco está en nosotros. Sin palabra, no hay devolución de la palabra. 

Si decimos una palabra negativa, nos devuelve la misma palabra negativa ampliada, profundizada y malsonante. Eso es la vida. Todo tiene el origen en nosotros. No puede ser de otra manera. Nosotros somos los creativos, los generadores de la vida, de las palabras y de nuestras realidades. 

El efecto boomerang actúa de la misma forma. Lo que lanzamos nos es devuelto. ¡Qué maravilla lanzar amor, bondad y comprensión! Siempre habrá personas que resonarán con nuestras palabras y nos las devolverán ampliadas y compartidas. 

Nos maravillamos y decimos: “esta persona es fabulosa. Me ama”. Es cierto. Puede que el eco nos devuelva ese regalo. Pero nunca debemos olvidar que la palabra de amor en nuestro interior fue la generadora de tal situación. El amor está en nosotros, en nuestro interior. Nadie nos lo puede quitar. Nadie nos puede frustrar. 

Nunca debemos olvidar que nuestro lanzamiento de amor procede de nosotros. Los demás son el eco de nuestra iniciativa. Y esa iniciativa nunca acaba, termina o desaparece. 

Así nos descubrimos poderosos, amantes, comprensivos y adquirimos una correcta visión de nuestro entorno creado por esas palabras lanzadas al eco en cada situación. 

Nunca perdamos esa claridad en la vida. El amor siempre está en tu interior. Lo lanzas. Hay personas que vibran y responden, bien como montañas amigas, bien como montañas amantes, o bien como montañas comprensivas. Ellas se unen a tus palabras en una amplitud conjunta de fuerza y sintonía.

sábado, enero 23

LA ECUACIÓN DE LA VIDA

Hay un refrán que nos da atisbos de nuestra visión de la vida: “piensa el ladrón que todos son de su condición”. El ladrón se reconoce como tal. ¿Qué ve el ladrón en los demás? El reflejo de su condición: los demás son ladrones porque lo es él.

Así que la cualidad de ladrón está en su interior y en su visión de los demás. Y se produce una ecuación singular. Yo soy ladrón + los demás son ladrones porque lo soy yo = Mi experiencia lo configura todo. 

Podemos representarlo de esta forma que contradice las reglas matemáticas: 1 + 1 = 1. Ladrón (mi experiencia) + ladrón (mi visión del mundo porque yo lo soy) = ladrón (yo lo configuro todo) 

Con esta ecuación comprendemos cuando se nos dice. “Si cambias tú, cambia el mundo. Si cambias tú, cambia también tu visión de los demás. El mundo no cambia. Cambia tu visión". 

Cada uno vemos en los demás el reflejo de nosotros mismos. Si somos sensibles, captaremos la sensibilidad. Si somos generosos, captaremos la generosidad. Si somos amables, captaremos la amabilidad. 

Creemos que vivimos en la dualidad. Yo + el mundo que me rodea = 2 (suma de dos cosas distintas). El refrán nos enseña que vivimos en la unicidad. Yo + el reflejo de mi yo en el mundo = Experiencia de mi yo (no hay suma de dos cosas distintas. Sólo hay una). 

Recuerdo con emoción el choque de dos visiones distintas sobre el mundo. Un joven inteligente y prometedor quería incorporarse a formar parte de una familia por compromiso con una de sus hijas. En la conversación entre el joven y el padre salió a relucir una visión del joven: “Todos los hombres mienten”. 

El padre, que captó de inmediato la realidad del joven, le replicó: "en esta familia la mentira está desterrada. Mina la confianza. Rompe las relaciones. Resquebraja los cimientos de la unión entre nosotros. No nos la permitimos". 

El joven argumentó, ofreció ejemplos, indicó cómo había solucionado conflictos con una mentira y no la veía mal del todo. El padre le dijo con autoridad que esa no era la actitud de la familia. Le sugirió que se pensara dos veces formar parte de ellos. 

El joven se sintió incómodo. Le hizo al padre la siguiente pregunta. “¿Entonces solamente entran a formar parte de esta familia los perfectos?” “No, eso nunca”, le contestó. "El problema no está en nosotros. El problema está en ti. No serías nunca feliz con nosotros. Te sentirías incómodo, no apreciado, no tenido en cuenta en tus afirmaciones. Nunca sabríamos cuándo dices verdad o no". 

"Nos podemos equivocar, podemos cometer actos inconsecuentes. Pero el perdón, la comprensión siempre se producen en la honestidad y en la sinceridad". 

Dos visiones de mundo que se encontraron frente a frente. El joven se dio cuenta de que su planteamiento estaba equivocado. Cambió su forma de actuar y cambió su visión del mundo. 



viernes, enero 22

EL PODER DE NUESTRAS CREENCIAS

Toda nuestra felicidad y toda nuestra desgracia está en las manos de nuestras creencias. Es una línea divisoria en nuestra vida. Si no se traspasa, estamos en el cielo. Todo funciona a la perfección. Si se traspasa, todo se hunde en nuestro cuerpo, en nuestra experiencia y en nuestro momento.

Carmen era una persona muy responsable. Se la había educado para cumplir bien sus deberes y se le habían puesto líneas de demarcación que no debía traspasar. Ella, obediente, las había seguido con mucha comprensión y aceptación. 

Trabajaba en una gran corporación. Un trabajo muy bien remunerado y con un puesto destacado. Una de sus creencias era la siguiente: debemos estar diez minutos antes en el puesto de trabajo para empezar, con todo preparado, a la hora en punto. 


Ella cumplía esta creencia totalmente. Pensaba que era lo correcto, lo sensato, lo responsable y lo adecuado. Ella misma ponía énfasis en la realización de esta norma (era su creencia). 


Todo iba bien. El tiempo transcurría con placidez. Veía que en algunas ocasiones sus compañeros de trabajo no seguían esta orientación. Llegaban un minuto antes al trabajo. Ella, interiormente, los censuraba. Los tachaba de irresponsables. 

Cuando se trataba de ofrecer puestos de mayor responsabilidad a algunos de ellos, ella le aplicaba siempre la norma. Muchos no escalaban. La norma de Carmen se lo impedía. 

Un día, una vecina, le llamó a su puerta. Tenía una emergencia. Necesitaba su ayuda. Carmen observó que si la atendía, llegaría más tarde a su trabajo. Se puso muy nerviosa. Trató de ayudar, al menos, lo mínimo. No podía llegar tarde. Ella no podía llegar tarde. Y le dijo a su vecina que no le era posible ofrecerle mayor ayuda. Salió rápida de casa con el alma dividida: seguir su creencia de la puntualidad y no haber prestado la ayuda a su vecina. 

En otra ocasión, de camino al trabajo, recordó que no había cogido unos documentos necesarios para ese día. Tuvo que regresar. Cogió los documentos y salió a toda prisa. El pulso se le aceleraba. El cuerpo se le comprimía. Y, prudente, aparcó su coche. No podía conducir. Todo su cuerpo se convulsionaba.

Una persona, al verla en tal situación, se acercó. Habló con ella. Trató de tranquilizarla. "No se preocupe", le dijo, "hoy llegaré tarde al trabajo pero usted es más importante". Trató de incorporarla y de sentarla en su coche. La llevó a urgencias. Una vez ingresada, le pidió que le dijera algún teléfono para informar a un familiar. Carmen, sorprendida, le entregó la agenda y le dijo que llamara a su esposo. 

Carmen quedó impactada. Su ataque de ansiedad era muy fuerte. Sin embargo, pudo ver, a través de esta persona, la generosidad y la equivocación de su creencia. Y la cambió: normalmente debemos ser puntuales, pero si hay alguna incidencia, la norma no debe aplicarse porque la rigidez tiene un precio demasiado alto. 

Carmen se dio cuenta que tenía muchas otras creencias rígidas. A partir de aquel día, se dedicó a ir ajustándolas para quitarles la dureza de no poder ser traspasadas. Así fue descubriendo la felicidad basada en sus creencias.

jueves, enero 21

SINFONÍA DE LA SONRISA

Sonrisas de contacto, sonrisas de aproximación
Sonrisas de alegría, sonrisas del corazón. 
Sonrisas que expresan contento 
Sonrisas que suenan a pasión
Sonrisas que huelen a aromas
De vibración intensa de los dos.

Sonrisas de los poros, sonrisas de ilusión
Sonrisas que vienen todos los días
Al umbral sereno de tu morada
Te alegran la cara, te alegran el alma
Y se deslizan, contentas, en tu mirada.

Viven felices cada momento
Muestran siempre fuegos de resplandor
De vibración conjunta y de fusión
Siempre nos dicen, con cariño, 
Soy de tu rostro precioso, el mejor embajador.

Te elevo a las alturas. Te descubro tu valor
Entro en contacto con la humanidad
Te pongo en sintonía con tu amor
Conmigo todo se hace bondad
Con la belleza de tu dorado candor.

miércoles, enero 20

LA ELECCIÓN EN NUESTRAS MANOS

Un hermoso resplandor se abre ante nosotros. Una luz de elección. Una visión de nuestras creencias manejadas por la mente y el corazón. Un programa de pensamientos internos dirigiendo la biología de nuestras células y de nuestro cuerpo en acción.

Primero está el programa de pensamiento. El programa ordena, según los pensamientos, las reacciones químicas. Las reacciones químicas, según sus componentes, ayudan a nuestro cuerpo o bien lo dificultan o bien lo deterioran. 


La creencia está a nuestro servicio. No es una determinación fatal. Si la creencia es tóxica, podemos cambiarla tranquilamente siendo conscientes. Así entramos en el proceso de cambio, de transformación de nuestras creencias. 

Las creencias adecuadas dirigen el pensamiento. El pensamiento dirige la cualidad de las reacciones químicas. Las reacciones químicas de las creencias adecuadas dan vida, bienestar, ayuda y vigor. Con una creencia adecuada hay total comprensión de nuestro cuerpo y su función. 

Una vez más, la elección está en nuestras manos. Somos libres y siendo conscientes podemos tomar la decisión. Una hermosa situación que está en nosotros con total disposición. La alegría está en el pensamiento, en los ojos y en el corazón.


martes, enero 19

EL EQUILIBRIO DEL AMOR

El amor genuino proporciona el poder de la transformación. Sin casi ser consciente de ello, la mujer acepta la mitad de la aportación masculina. El hombre acepta la mitad de la aportación femenina. Una simbiosis de plenitud no pensada. Es una experiencia. La mujer y el hombre se completan.

Se descubren distintos, diferentes a los de la unión. Ahora la simbiosis ha aparecido. La mujer se hace más noble, más comprensiva. Sabe pedir perdón sin perder un ápice de su dignidad. Al contrario, se hace fuerte en bondad y poderosa en genuino amor. Se entrega y se rinde con pasión.

El hombre se vuelve más complejo. Sabe entender el mundo de las emociones mucho mejor. Sabe caminar por la senda de la sensibilidad sin perder nada de su esencia natural. Se vuelve apoyo en el camino del descubrimiento del genuino amor. Y su rendición es total en los brazos de la unión. 

Es un milagro de fusión a nuestro alcance. Abrir las puertas al cambio del pensamiento. Abrir la mente a considerar al otro como parte nuestra. Amarnos a nosotr@s mism@s con total dedicación sabiendo que la mitad de nosotr@s es el/la otr@ en nuestro corazón.

lunes, enero 18

BELLEZA DE LA NATURALEZA - BELLEZA DEL CORAZÓN

La belleza de la naturaleza nos sorprende, nos embelesa, nos detiene. Nos atrapa y nos hace disfrutar dulcemente. Y eso nos hace recordar que nosotros somos también naturaleza y en nuestro interior habita esa belleza de forma perenne. 


ARMONÍA EN CADA MOMENTO

Siempre me llamó la atención el comportamiento de nuestro director. Cada vez que se cruzaba con alguien lo saludaba y le decía algunas palabras de encomio por algún detalle que la persona había hecho. No dejaba la ocasión de poner de relieve los logros alcanzados en cada momento.

A todos nos alegraba. Cruzarse con él era muy agradable. Nos hizo sentir que cada gesto, cada acción, cada dedicación del momento era especial e importante. Ese encanto quedó grabado en nosotros. Uno se da cuenta de la importancia de cada eslabón de la cadena que se va construyendo. 

Ahora, cada acción que realizo tiene el sello de la conformidad interior. Cada logro es motivo de alegría y de gratitud. Cada “pequeño detalle conseguido” es un bienestar personal. 

Dar gracias por el agua que disponemos. Dar gracias por el techo que nos cobija. Dar gracias por la comida. Dar gracias por el aire que respiramos. Dar gracias por el saludo. Dar gracias por la sonrisa. Dar gracias por comprender el momento difícil que alguien sufre. Dar gracias por animar. Dar gracias por nuestros pasos. Dar gracias por caminar. 

Dar gracias por ser humanos. Dar gracias por no hundirse en la inconsciencia de cumplir, como un robot, las tareas y tenerlas tan mecanizadas que no vivimos con emoción. Dar gracias por estos momentos de lectura que nos despierta la visión. Dar gracias. . .

domingo, enero 17

EXPRESIONES PODEROSAS

Estaba en los instantes previos a una conferencia. Había movimiento. Las personas tomaban asiento. Mucho tráfico en el escenario. Técnicos de sonido, de imagen, todos deambulaban con celeridad, precisión y pericia. Un momento de energía expectante. Vi al conferenciante en las primeras filas. Relativamente tranquilo, relajado, agradeciendo a todos sus colaboraciones y a todos los técnicos.

Desde mi lugar, mi impulso me pidió que fuera a darle un abrazo. Agradecía que se esforzara por compartir con nosotros sabiduría, consejos, propuestas y, sobre todo, mucho cariño y mucho afecto. Tuve temor de interrumpir. No sabía qué hacer. Le lancé toda mi vibración. No pude captar su mirada y poder compartirla con la mía. 

Una semana después, pude verlo personalmente y le compartí el impulso que tuve en aquel momento. Se le alegró la cara. Se puso muy contento. “Por favor”, me dijo, “no te limites nunca”. "Un abrazo, con afecto, con cariño, con agradecimiento, siempre es germen de sustento". 

Me di cuenta de la esencia y el fundamento de la expresión corporal en nuestras vidas. No se necesitaban palabras. No se necesitaban pensamientos. No se necesitaban estrategias. Se ponía de manifiesto la luz alada de un fuerte abrazo con el sentimiento. Unos ojos alegres, emocionados. Una mirada compartida desde lo hondo y la vida vibrando en nuestro encuentro. 

Felices instantes que nos regalan abrazos tan poderosos. Construyen nuestras vidas y nuestro amor fabuloso.

viernes, enero 15

ALEGRÍA DEL CANTO Y DEL MOVIMIENTO


FELIZ SÁBADO GOZOSO

Alegría de sábado, alegría de encuentro
Unión de vida, unión de pensamientos

Caminar sereno, fuerza del aliento
Que nos llena con ternura

Los huecos vacíos del aislamiento.

LA FUERZA DE LA DECISIÓN PERSONAL

Sentir la pasión en nuestro interior. Sentir la confianza en nuestro camino. Oír la serena voz interior que nos susurra en nuestros momentos de quietud. Es nuestra opción de construirnos.


BELLEZA POR DOQUIER

Bellezas compartidas, Bellezas de bondad

Bellezas de palabras que alcanzan la verdad

Bellezas enormes vibrantes llenas de felicidad

Bellezas del instante del día 

Que rompen la rutina de la cotidianidad.

LA CORRESPONDENCIA EN EL AMOR

El amor es una planta. Es una relación consigo mism@. Con el otr@. Con el entorno. Con el sol que da vida. Es un equilibrio de fuerzas y energías que confluyen para desarrollarse en armonía. Las plantas deben ser especies distintas para no competir por los mismos nutrientes.

No deben darse sombra. El sol debe alcanzarlas por igual. Quitarse el sol una a la otra es nocivo para la vida. Deben tener espacio para desarrollarse. Nada se lo debe impedir. El pleno desarrollo es vital para gozar de la vida y experimentar ricos y hermosos descubrimientos. 

Las dos plantas deben permitir el paso del agua y del aire que les proporciona la posibilidad de nutrirse y expandirse. Con estos factores todo funciona a la perfección. 

Si en algunos de estas características no hay correspondencia, siempre hay la posibilidad de transformarse, cambiarse para dejar espacio al crecimiento. Se puede alcanzar la armonía. Se puede lograr la adaptación. El amor es generoso y sabe de esas cosas que nacen del corazón.

jueves, enero 14

CADA DÍA EN PLENITUD

La energía nos viene cada mañana. La luz del día nos despierta con su majestad de belleza y alegría. Nos vemos inmersos en luz y felicidad. El descanso nos ha regenerado. Nos ha transformado. Nos ha restaurado. ¡Hermoso descanso!

Nuestro primer pensamiento es de gratitud. Gratitud por ese dulce descanso. Gratitud por el nuevo regalo del día envolviéndonos en un abrazo. Nuestra mirada se enfoca en esa sensación de acogida y de encanto. Nos vamos despertando. La sonrisa asoma en nuestros labios. La dicha se hace presente en un corazón confiado. 

Miramos el día con nuestros proyectos, nuestros deseos y nuestros encuentros. Además, decimos: “todo sea para la conjunción y la unión de nuestras manos”. Allá en el fondo, se enciende una luz pequeña, diminuta pero intensa y amante. 

Nos dice: “Si estás atent@, te sorprenderé una vez más”. Y sigue: “Puedes hacer tus proyectos, puedes hacer tus decisiones, pero sabes que colaboro contigo y pueden cambiar las circunstancias y las visiones”. Y recordamos los momentos que cambiaron en un segundo por algo inesperado. 

Y le damos las gracias porque en nuestro camino y en nuestro contacto siempre nos sentimos acompañados. La soledad ha desaparecido. Y con una alegría nueva empezamos el día hablando, confiando. Y con esa luz diminuta, brillante, en nuestro interior, vibrando.

miércoles, enero 13

LA LIBERTAD DE ELECCIÓN

Nos creamos en cada elección que hacemos. Nadie nos puede quitar esa libertad de elección. Nelson Mandela estuvo preso durante 27 años. No tenía libertad física. Aparentemente todo estaba perdido. Sin embargo, su elección fue el cuestionamiento de los principios de separación y su anhelo de reunificar su país entre blancos y negros. Su libertad de elección funcionó, como en ti y en mí, una vez más. Y lo que cuenta es la elección.

En cada acto sencillo de nuestro diario vivir estamos haciendo elecciones. Podemos amar el momento presente y sus oportunidades o hacerlo a regañadientes. Podemos aprender de la invitación de la vida o rechazar su ofrecimiento. 

Disponemos en nuestras manos del poder de creación. Estar abiertos para aprender nos transforma. Nuestro cuerpo funciona con los desafíos, con la ilusión y con la pasión que nos envuelve. Toda célula se llena de sustancias positivas en nuestra corriente sanguínea. 

Así, mente y cuerpo se unen en el objetivo común de acceder a la vida diseñada por nuestros sueños vibrantes llenos de confianza, de visión y de poder. 

La libertad del amor

El amor genuino nos libera de toda atadura emocional. No permite ninguna coacción. Echa fuera los elementos nocivos en la relación. El amor tiene sus raíces en la mutua admiración. Bebe de los frutos del respeto total. Se asienta en el tronco del engrandecimiento del otro. Es el árbol cuya sombra nos colma de plenitud y transformación.

domingo, enero 10

EL MISTERIO DE LA VIDA

Siempre me impactó la actitud de la sabiduría de una persona sencilla y amable. Ella, en cada ocasión, le hacía una misma pregunta a la vida. ¿Qué me quieres enseñar? Y adoptaba la posición de discípula, de aprendizaje.

“Sé que siempre me cuidas. Sé que sigues mis pasos. Sé que estás pendiente de mi momento y de mi estado. Sé que quieres hablarme con voz serena y despacio. Quiero aprender de ti porque te siento tan cerca que casi te confundes conmigo. Quiero dejarme llevar por tu fuerza y tu saber. Y dejarme columpiar con las notas armoniosas de tu amor y tu poder”.

CANTO DE UNIÓN

La unión, la colaboración, la fusión de las personas como maravillas especiales de la naturaleza toma expresión en este canto de belleza sin igual.

Disfrutémoslo en toda su dimensión dejando sorprendernos, una vez más, por las dulzuras virginales que anidan en nosotros con sencillez natural.


viernes, enero 8

UNA LUZ EN LA OSCURIDAD

Se levanta cada mañana con la mente fresca y descansada. El maestr@ reúne alrededor suyo los dulces rayos del sol naciente en las horas del alba. Los acaricia, los observa, los aprecia y los deleita en su piel y en su mirada. Dulces momentos de meditación inundan su alma. Su vista se perfila y profundiza. Las nuevas luces le muestran territorios inexplorados, dispuestos a ser trillados y ordenados por la acción de su programa. Llena su corazón, rebosa su alma.

El día promete. La ilusión se ha colado por las rendijas de su mente. Le alumbra la mirada. Su vida interna late rodeada con la dulzura de las vidas prometedoras de los alumn@s en sus manos entregadas. Se mira a sí mism@ y mira los rostros anhelantes de gozo, de alegría, de dulzura, de razonables desafíos y de unos líos internos en algunos de los pupilos de su aula. 

Pero el sol sigue brillando en su vida y l@ sigue subiendo hacia arriba con la ligereza del viento y la ingravidez del gozoso pensamiento. La vida, y la experiencia de cada día, le ha enseñado a caminar entre las nubes de algodón que le ofrecen su belleza y sus palabras. 

Y no baja a las trivialidades diarias, a los desánimos aparentes de los reveses vividos, como dramas y como desgracias. Allí, en su entorno blanco, puro e inmaculado, aprende la perspectiva que transforma la vida, remodela la mente y llena la boca con nítidas y deliciosas palabras. Allí respira el oxígeno pleno, lleno de energía y de fabulosa gracia. 

Se siente parte del viento, de la brisa, del azul del cielo y los rayos suaves del sol en su cara. Su corazón late firme y armonioso en la cordialidad de su mano y en la frescura de su mirada. 

Y se llena, se identifica, se hace universo, se hace cascada de agua limpia bañando, con sus gotas, los mundos internos de jóvenes creciendo y descubriendo el misterio de la vida, de los valores eternos que los propulsarán, con sus fuerzas y energías, a eternidades profundas. 

Ahora, el maestr@ ya está preparado para el contacto de tantos hermosos ojos, de tantos hermosos proyectos, de tantos ideales de vida que se cruzan en su camino, dándoles, a cada uno, su bienvenida. Además de la materia que imparte, se llena de encanto su figura, su semblante y su palabra. Además de las explicaciones, surge, de su zona interior, el fulgor de los rayos atesorados en las primeras horas del alba. El misterio de la vida encontrará entonces su danza para hacerse presente, una vez más, en esa concurrida aula. 

El día sigue su curso con ese encanto de nubes, con esa pureza de algodón en sus charlas, con ese mirar claro y sincero de los rayos del sol. Rayos atesorados en la silueta fresca y vibrante de sus manos generosas y abiertas. Su luz se hace vida y cambia la vida en luz con su actitud, con su lápiz y con su cuaderno lleno de notas especiales y de profundo amor. 

El maestr@ termina su día y da gracias a la fuente de la existencia, a esa fuente que todo lo organizó. Se siente segur@ en sus manos. Siente su aire fresco en las soluciones que puso en cada un@ para alcanzar la dicha sentida de cumplir, con humildad, fielmente, la misión.

La dinámica del amor

El amor da vida. Llena de vida brillante, en primer lugar, a uno mismo. Se siente agradecido por la vida. Se respeta. Se valora. Se admira. Se reconoce. Se acepta. Se siente bien consigo mism@. Se ve con los ojos del amor. Se ve con la comprensión infinita de la bondad. Se ve como un prodigio que ha brotado en la naturaleza. Se ve como esa flor, ese paisaje, ese arco iris que nos asombra. Se regocija, interiormente, por palpar esa vida en sus venas.


Así se llena su depósito interior. Así se colma toda su esperanza. Y, en segundo lugar, comparte con los demás ese tesoro que lo hace vibrar.

jueves, enero 7

FELIZ AÑO

Pasos del día, belleza compartida
Ojos que miran tranquilos
Mirada sorpresiva
Experiencias que nos esperan
Para ser vividas.

miércoles, enero 6

El secreto de la creatividad y la creación

La generosidad es el camino para crear ambientes de misterios. Afloran nuevos brillos. Inundan los ojos con nuevas realidades. Descubren, sin esperarlo, huecos escondidos del alma. Se desarrollan nuevas relaciones y alcanzan, en cada ocasión, pasos alados del caminar alegre del día.

Permíteme

Permíteme, en estos momentos intensos, compartir contigo algunos pensamientos. Palabras que puedan resonar en tus momentos de relax, tranquilidad y descanso. Palabras que puedan alumbrar nuevas realidades en nuestro diario caminar. Palabras que despierten el misterio precioso que anida en tu presencia, en tu cuerpo y en tu despertar. Permíteme, en ese espacio, entrar.

Tu nobleza es sublime, tu claridad, excelsa y tus deseos, magníficos por la altura de tu mirada. Por todos tus poros se expresa la autenticidad que tiene en ti, hermosa morada en tu pensar, en el amor a los otros y en tu apreciable sensibilidad. Estás hech@ de generosidad, como todos los seres humanos, y lo vives con franqueza y con especial ilusión. Todo lo bueno está en nosotros porque la fuente de la alegría y la felicidad nos engendró, nos modeló.

Nosotros, sin darnos cuenta, buscando, desorientados y, en algunos momentos dudando, nos polarizamos. Nos hacemos exigentes. Aparece alguna brusquedad. Perdemos el equilibrio que todo lo une con susurros de amor y atención. Y nuestra fuente, que conoce el anhelo de nuestro corazón, nos va completando, afinando y poniendo, otra vez, en su hermosa y completa vibración. Nosotros dudamos y pensamos que nos tiene que transformar, cambiar, profundizar. . .

Y sin embargo, al beber y deleitarnos con la misma agua, solamente nos tiene que afinar. Poner paciencia donde está nuestra ansiedad. Poner dulzura donde está nuestra exigencia. Mirar con cariño cuando sale nuestra obcecación. Calmarnos suavemente cuando surge la frustración. Aceptarnos totalmente cuando dudamos de nuestra excelsa fuente interior. Caminar con nuestra voz vibrante, con nuestra agua interior. Así la vida se hace luz y la luz se hace vida en nuestro transitar.

Foco del amor

El amor auténtico es un enfoque en el otro. Un olvido de sí mismo. La alegría viene por la felicidad del otro. Al centrarnos en el otro nos olvidamos de nosotros mismos. Ese es el misterio del amor. Desaparecer nosotros mismos.

martes, enero 5

DELICIA DE LA JORNADA

Instantes preciosos de la mañana
Sones dulces de melodías
Llenan los huecos ocultos
del palpitar de la vida